Shell es una de las compañías que apuesta al futuro de Vaca Muerta. La empresa anglo-holandesa cuenta con una producción de 55 mil barriles entre operado y no operado, y espera superar los 70 mil barriles con los proyectos construidos.

Ese fue el panorama brindado por Ricardo Rodríguez, CEO de Shell, en el marco del evento Vaca Muerta Insights, organizado en forma conjunta por LM Neuquén, Más Energía y Econojournal.

Para el directivo, la capacidad de transporte atenta contra los proyectos de Vaca Muerta y sostuvo que los retrasos del proyecto Duplicar debido a la situación macroeconómica del país van a estar saldados a fin de año.

“Una vez que eso se da, tanto la primera etapa de este año y la próxima etapa del año que viene, vamos a poder llenar todas nuestras plantas junto con nuestros socios”, subrayó.

Sobre el plan de desarrollo a futuro, la compañía estará invirtiendo alrededor de 500 millones de dólares poniendo el foco en los sistemas de transporte de producción para después ocuparse en lo que será la falta de equipamiento.

“Una vez que ya no haya un cuello de botella en el sistema de evacuación, el próximo cuello de botella va a ser compañías de servicio. Específicamente fracturas, set de fracturas y taladros de perforación. Somos muy optimistas con el futuro que vemos en Argentina y tenemos muchos proyectos en los próximos años”, afirmó.

Hay que recordar que en el marco de su compromiso con la transición energética, Shell firmó un acuerdo con Genneia, la compañía líder en generación de energías renovables en Argentina, para abastecer la demanda energética de sus bloques operados en Vaca Muerta.

Dicha alianza concretará a través del sistema privado Mercado a Término de Energías Renovables (MATER), con un contrato de provisión de energía verde que tiene una duración de 7 años para cubrir las operaciones de Shell en Argentina, iniciando el 1° de mayo de 2024. La energía renovable será suministrada desde un pool de activos de Genneia, conformado por parques eólicos y solares.