La actividad hidrocarburífera de Chubut se encuentra en una caída que se agrava con el correr de los meses. La parte norte de la Cuenca del Golfo San Jorge nunca recuperó la cantidad de equipos activos en la prepandemia y los registros de productividad son cada vez más preocupantes. El Tordillo es uno de los mejores ejemplos para graficar lo que pasa en el convencional.
La situación no es nueva. El Sindicato de Petroleros Privados de Chubut, con sede en Comodoro Rivadavia, se movilizó el 1 de septiembre se movilizó a Rawson para entregar un petitorio al gobernador Mariano Arcioni en busca que gestione una mesa con Nación para encontrar una salida al problema.
La respuesta nunca llegó y los problemas se agudizaron. Tecpetrol paralizó un perforador y un workover poniendo en jaque los puestos de trabajo en El Tordillo. La compañía del Grupo Techint había comprometido 120 millones de dólares en el yacimiento escuela, pero la situación de la región hace difícil cumplir con ese plan de inversiones. “Tecpetrol, en Chubut, dijo basta. Sin incentivos, las inversiones programadas son inviables”, afirmó Carlos Gómez, secretario adjunto del Sindicato de Petroleros Privados de Chubut, en la asamblea desarrollada en Cerro Dragón, otra área emblema de la región.
“Las consecuencias las pagan todos los compañeros trabajadores, compañeras trabajadoras y las empresas contratistas. Tecpetrol en Vaca Muerta es la aliada estratégica del gobierno nacional durante 35 años, con incentivos, récord de inversiones, producción y empleo”, cuestionó.
En este sentido, el dirigente gremial consideró que El Tordillo es el reflejo del abandono del Gobierno nacional a la Cuenca del Golfo San Jorge. “En 2013 había 693 pozos activos y en 2023 solo hay 283. En el 2013 había 244 pozos de inyección y en 2023 hay 82. Los pozos inactivos pasaron de 491 en 2013 a 1.107 en 2023. En el 2013 había 127 pozos abandonados y ahora tenemos 194”, detalló.
Esa caída en la actividad tiene un impacto directo en los puestos de trabajo. Jorge Ávila, secretario general de los petroleros convencionales, graficó lo que se vive en un área que supo ser de las más pujantes del país. “Cuando fuimos a Tecpetrol y vimos que había más gente de comisión directiva y delegados que gente en sus puestos de trabajo duele. Eso no podemos permitir. No podemos permitir que nos vuelva a pasar”, aseveró.
“Con Tecpetrol tenemos récord de baja de producción. No genera regalías y no genera exportaciones”, cuestionó Gómez.