No fue un año de festejo para la Cuenca del Golfo San Jorge. Atrás quedaron los 13 de Diciembre donde se anunciaban grandes inversiones o proyectos que den un salto cuantitativo en la producción convencional. Hay trabajadores que están en sus casas, una caída de la producción y se esperanza con que marzo marque un nuevo sendero para Chubut.

El panorama que trazó Jorge Ávila sumó un nuevo condimento: “hay actores políticos que le ponen trabas a las inversiones” y marcó la cancha para lo que viene. “Nosotros no le vamos a regalar nada a nadie. Vamos a pelear todo y enfrentarnos con lo que tengamos que enfrentarnos para solucionar los problemas de la Cuenca del Golfo San Jorge”, subrayó el titular de Petroleros Privados de Chubut.

En conferencia de prensa, el titular de petroleros convencionales manifestó que el convencional debe encontrar nuevos yacimientos y trabajar en la eficiencia para volver a ser competitivos en la industria hidrocarburífera.

“La productividad empieza a ser tan cara que ya no se aguanta la cantidad de trabajadores y la inversión que hay que poner.  Entonces, cuando uno empieza a mirar los sueldos altos y toda la exigencia que hay en el medio, se dice ¿por qué voy a invertir?”, consideró.

“Nosotros podemos tener alguna cosa para mirar y decir: ‘sí, tenés razón. Vamos a hacer esto para colaborar con la cuenca’. Pero todos tenemos que colaborar”, subrayó.

Chubut y los trabajadores suspendidos

Mientras que en la Cuenca Neuquina está cerca de superar los 50 mil trabajadores activos en la yacimientos, en la parte norte de la Cuenca del Golfo San Jorge hay 2500 trabajadores suspendidos y apenas hay 9 mil operarios en los áreas.

Según el titular del gremio de Petroleros Privados, el 1 de enero se reanudaría la perforación en los bloques de Pan American Energy (PAE). Mientras que en marzo pasaría lo mismo con las áreas de Capsa y tendría que estar solucionado la venta de los activos de Tecpetrol en Chubut.

En este sentido, Ávila manifestó que Petrominera puede quedarse con el bloque El Tordillo. “Nosotros estamos peleando eso. Si miramos los 15 millones de dólares que es la inversión que va a hacer Tecpetrol, la podemos poner nosotros. Después, si queremos hacer una inversión más grande, tendríamos que salir a un socio para que nos ayude a invertir, que sería otra de las cosas que se podría hacer en el futuro. Por eso está todo para mirar, todo para ver y sentarse a conversar qué es lo que se va a hacer”, afirmó.

Trabas en el camino

Petrominera también se haría cargo del yacimiento Restinga Alí, que YPF decidió no venderlo en el Proyecto Andes. “Todavía no se ha entregado, pero sí va a quedar en manos de Petrominera. Ahora uno mira el yacimiento y ve que no tiene reconversión. Vos ahí no podés agregar polímero, no podés agregar nada, porque va todo al mar. Entonces, es el yacimiento que la tienen que recibir y la obligación de recibirlo es de Petrominera. No tenemos a otro que la venga a mirar”, aseveró Ávila.

Asimismo, el dirigente gremial cuestionó los inconvenientes para que Pecom pueda hacerse cargo del clúster Campamento Central – Cañadón Perdido. Ávila apuntó contra una parte de la clase política que “no sabe de dónde sacar plata” y frena las inversiones.

“(Campamento) Central no tiene más crecimiento. No puede perforar en Kilómetro 3, Kilómetro 5 o Kilómetro 8. No tenemos más crecimiento. Entonces, ponerle trabas a un operador que viene a Comodoro Rivadavia me parece una falta de respeto a la inversión, que quieren hacer lo que corresponde, por lo menos arriesgarse y a poner a mano el bolsillo para ver si podemos salir de este problema”, criticó.