El sector minero creció un 9,7% en el primer cuatrimestre comparado con el mismo período del año pasado, pero no todas las ramas de actividad tuvieron el mismo desempeño.

El litio fue la “estrella” de los primeros cuatro meses del año. Registró una mejora del 49,7% en el primer cuatrimestre.

Según el Indec, la extracción de carbonato de litio y otros minerales de litio mejoró un 40,6% en abril. El precio del litio alcanzó más de 20 mil dólares por tonelada en el primer trimestre.

Este precio es significativamente mayor al costo de producción, que ronda los 4 mil dólares por tonelada. Esto refleja un amplio margen de rentabilidad en la explotación del mineral.

El aumento en la extracción de litio está relacionado con el incremento de la demanda y su potencial futuro. El litio es esencial para las baterías de iones, impulsadas por la industria de vehículos eléctricos y energías renovables.

El panorama para la minería en Argentina parece prometedor, especialmente en lo que respecta al litio. Argentina tiene tres proyectos en producción y 35 en distintos grados de avance.

La Argentina es el país con mayor inversión en exploración de litio actualmente, según S&P Global Intelligence. Según CRU, la producción de litio podría crecer anualmente un 50% hasta 2027.

Argentina podría convertirse en el segundo o tercer mayor productor mundial de litio, superando a China y posiblemente a Chile.

Cómo le fue al resto de la industria minera

No sólo el litio creció durante el primer cuatrimestre. La extracción de sal aumentó un 52,7%, destacándose la “salmuera o solución saturada de sal” con un crecimiento del 61,7%.

La producción de petróleo crudo y gas natural también mejoró. Según el Indec, esta rama de la minería registró un incremento del 10,7% en sus volúmenes de extracción.

La extracción de minerales no metalíferos y rocas de aplicación aumentó un 7,2%. La explotación de minas y canteras creció un 46%.

Sin embargo, otras ramas de la minería decrecieron. La extracción de minerales metalíferos disminuyó un 2%.

La extracción de rocas ornamentales cayó un 24,4%. La producción de piedra caliza y yeso disminuyó un 14,4%. La extracción de arenas, canto rodado y triturados pétreos bajó un 3,8%. La extracción de arcilla y caolín disminuyó un 19,7%.