El último informe de J.P. Morgan sobre YPF, publicado el 9 de noviembre de 2025, muestra un panorama de contrastes para la petrolera nacional. La entidad calificó el desempeño del tercer trimestre como “robusto”, con un EBITDA ajustado de 1.357 millones de dólares, en línea con las estimaciones propias y del consenso de mercado.
Según el banco, el buen rendimiento estuvo impulsado por la mayor producción shale, la venta de activos maduros y costos de extracción más bajos, además de mayores ventas de gas natural estacionales y récords en el procesamiento de refinerías. Sin embargo, advirtió que la fuerte inversión y la compra de Total Austral S.A. afectaron el flujo de caja y aumentaron el endeudamiento.
Resultados destacados: solidez operativa en upstream
El informe de J.P. Morgan resalta que el segmento upstream fue el motor del trimestre. YPF registró un EBITDA de 1.042 millones de dólares en esta área, con un crecimiento del 35,3 % frente al trimestre anterior, superando las estimaciones del banco en un 5 %.
La producción de petróleo y gas alcanzó los 523 mil barriles equivalentes por día, y los precios realizados, junto con menores costos de lifting, ayudaron a mejorar los márgenes. Según el reporte, los costos de extracción cayeron 28,5 % trimestre a trimestre, ubicándose en 8,8 dólares por barril equivalente, frente a los 12,3 dólares del segundo trimestre.

J.P. Morgan también subraya que la diversificación energética comenzó a mostrar resultados. La división New Energies aportó un EBITDA de 56 millones de dólares, duplicando su desempeño anterior, impulsada por la subsidiaria Metrogas y la mayor demanda residencial.
Aunque el segmento de Gas Licuado e Integrado (LNG) presentó un resultado negativo de 4 millones de dólares, el banco lo consideró mejor de lo esperado, superando la proyección de pérdida de 15 millones. El avance en este rubro se atribuye al progreso en el proyecto Vaca Muerta Onshore Supply (VMOS), que alcanzó un 35 % de ejecución al cierre de septiembre.
Desafíos en downstream y presión sobre los márgenes
Pese al avance operativo, no todo fue positivo. J.P. Morgan indicó que el negocio de Mid & Downstream —refinación, transporte y comercialización— fue una fuente de presión. El EBITDA del segmento cayó 19,4 % respecto al trimestre anterior, hasta los 354 millones de dólares, cifra ligeramente inferior a las estimaciones del banco.
El reporte detalla que los costos operativos (OPEX) se mantuvieron altos por el elevado nivel de procesamiento en las refinerías, que alcanzó un 96,5 % de utilización, el mayor desde 2009. Esa exigencia respondió a una parada programada en el complejo de La Plata durante el trimestre anterior, lo que forzó una compensación de volumen.
A pesar de la eficiencia técnica, el costo operativo por barril se mantuvo en 105 dólares, un valor superior al esperado de 100 dólares, lo que afectó la rentabilidad del negocio. Según J.P. Morgan, esta diferencia “justifica parcialmente el desvío frente a nuestras estimaciones” y pone de relieve la necesidad de controlar los costos ante un entorno local volátil.
Flujo de caja negativo y aumento de deuda por nuevas inversiones
El banco estadounidense advirtió que el flujo de caja libre (FCF) fue negativo en 756 millones de dólares, una cifra esperada debido a las altas inversiones en curso. En total, YPF destinó 1.700 millones de dólares en gastos de capital, principalmente en Vaca Muerta y VMOS, además de desembolsar 523 millones de dólares por la adquisición de Total Austral S.A.
J.P. Morgan explica que estos movimientos se financiaron parcialmente con un flujo operativo bruto de 1.200 millones, pero que el endeudamiento neto creció hasta 9.600 millones de dólares. La relación deuda neta/EBITDA subió de 1,9x a 2,1x, aunque el banco aclara que el indicador sigue dentro de niveles manejables dado el crecimiento proyectado de la compañía.
El informe también menciona pagos de intereses por 217 millones de dólares y compromisos de leasing por 102 millones, lo que presionó aún más el flujo de caja. Aun así, los analistas mantienen una visión optimista de mediano plazo gracias a la fuerte generación operativa del negocio principal.

Perspectivas: crecimiento moderado y solidez en upstream
Para J.P. Morgan, el panorama hacia adelante es levemente positivo. El banco espera que YPF mantenga un crecimiento moderado del EBITDA, acompañado por una reducción gradual del apalancamiento a medida que los nuevos proyectos comiencen a generar caja.
El informe mantiene la recomendación “Overweight” sobre las acciones de YPF, con un precio objetivo de 36,26 dólares (al 7 de noviembre de 2025). Entre los argumentos de respaldo, se destacan la consolidación de Vaca Muerta, el avance del proyecto de GNL y la eficiencia alcanzada tras la venta de campos maduros.
J.P. Morgan concluye que, si bien la petrolera enfrenta un entorno macroeconómico desafiante y presiones en sus segmentos de refinación, su fortaleza operativa en upstream y la diversificación energética sostendrán la rentabilidad a largo plazo.