La importación de combustibles en Argentina experimentó una drástica caída durante 2024, con una reducción del 83% interanual, según el informe de resultados de YPF del cuarto trimestre. Este descenso está directamente relacionado con la recuperación de los precios locales, una menor demanda interna y una mayor capacidad de refinación nacional.
En 2023, la demanda de combustibles en el país fue excepcionalmente alta debido a una brecha negativa del 20% respecto a los precios internacionales. Sin embargo, la situación cambió en 2024, cuando el volumen total importado representó solo el 2% de la demanda local, comparado con el 11% del año anterior. Este cambio responde a la estabilización del mercado, impulsada por una mejor planificación estratégica y el fortalecimiento de la producción interna.
La caída en las importaciones también se reflejó en el cuarto trimestre del año pasado, cuando se registró una disminución del 72% respecto al trimestre anterior. Este ajuste estuvo impulsado principalmente por un menor volumen y costo unitario de gasoil, reflejando una mayor autosuficiencia energética del país.
Los factores de YPF
Uno de los principales motores de esta reducción en las compras externas de combustible fue la recuperación de los precios locales. En 2024, el valor de los combustibles en el mercado interno aumentó un 13% medido en dólares, lo que redujo significativamente la diferencia con los precios internacionales. Esta convergencia eliminó la necesidad de importaciones masivas, como ocurrió el año anterior.
Además, la modernización de las refinerías de YPF, como la finalización de las obras en el Topping D de la Refinería La Plata y el aumento en la capacidad de bombeo de crudo desde Puesto Hernández, permitieron un mayor procesamiento de petróleo nacional. Esto incrementó la autosuficiencia del mercado local y redujo la dependencia de insumos importados. En 2024, el crudo procesado promedió 301 kbbl/d, alcanzando una utilización del 89% en las refinerías, lo que contribuyó significativamente a la reducción de importaciones.
Otro factor determinante fue la menor demanda de combustibles en el mercado local, especialmente de gasoil, cuyo consumo descendió un 10,2% en comparación con el año anterior. A pesar de esta caída, la demanda de naftas mostró signos de recuperación en el segundo semestre, con un aumento del 5,6% en el cuarto trimestre.
Impacto en el mercado
La menor importación de combustibles también se explicó por una contracción del consumo. En 2024, la venta local de combustibles cayó un 7% interanual debido al incremento en los precios y la menor actividad económica. Sin embargo, durante el segundo semestre del año, la demanda comenzó a mostrar signos de recuperación, creciendo un 4% trimestral en el último periodo del año. Este comportamiento responde a una estabilización del mercado tras la fuerte devaluación ocurrida a finales de 2023.
Para el futuro, YPF proyecta mantener su estrategia de optimización de costos y eficiencia en la refinación para sostener la tendencia a la baja en la dependencia de importaciones. La combinación de una mayor producción interna y un ajuste en los precios podría consolidar este nuevo equilibrio en el mercado de combustibles en Argentina.
Además, la compañía prevé continuar con inversiones en infraestructura, incluyendo la expansión del oleoducto VMOS, que permitirá incrementar la capacidad de exportación y fortalecer la producción nacional.